Far away of the twilight

Mi mes hasta ahora laboralmente ha sido un infierno, cierre del mes, planificaciones, subcontratas, céntimos que descuadraban del cierre trimestral, las clases, el profesor que necesita una fuerte dosis de endorfinas para no amargar tanto...

Vamos en definitiva un no parar, a eso le añadimos una mudanza de oficina y el cambio de horario para poder estudiar por las tardes yendo al gimnasio a las 7 de la mañana, sin embargo, como tod@s sabéis me encantan los retos y esta semana sin duda alguna ha sido un reto toda ella y como siempre me suele pasar en todos los campos a excepción del sentimental he salido de rositas y con honores :D

Hablando el otro día con mi discípulo Chuck, me comentaba que la Estabilidad que poseo es envidiable por much@s, que existe poca gente que pueda tener la posición que poseo, a la edad que tengo, demasiadas casualidades (o tal vez no ;) ) se han dado para estar donde estoy, me animaba a no desfallecer, ya que me conoce desde hace años y sabe perfectamente que siendo un poeta inspirado por los genios del romanticismo como soy, para mi, la posición laboral, la pasta, el coche de empresa, la flexibilidad en los horarios, las relaciones y contactos que poseo y el millón de posibilidades que tengo unidos a las dotes naturales o trabajadas que tengo, todo ello, todo en conjunto, metido en una enorme contenedor de barco, no valdrían nada si me pusiesen a escoger entre ello y tener esa libra de carne que latiese junto a la mía, sin duda alguna mi discípulo es mucho mas racional que yo...


Y me hizo pensar.


Por otra parte miro a mi alrededor, veo a personas que han perdido a uno o varios miembros de su familia, ya sea por edad, por accidentes o enfermedades.

Existe una madurez sentimental al perder a alguien que, por cruel que pueda sonar, solo puedes obtener cuando muere alguien a quien realmente quieres.

En los casos de personas cercanas a mi puede ser un amigo cercano a la familia, un anciano pariente, alguien a quien el gran Cabrón se ha llevado tras un proceso lento y agónico de quimioterapia, o simplemente en mi caso, alguien que sin merecerlo salió por la ventana de un coche al tener un accidente y no llevar puerto el cinturón, todas estas personas significaban algo muy importante en nuestras vidas, tenían una parcelita en nuestro corazón, aportaban peso al mismo, distinto de cuando pasas del amor a la indiferencia o esa persona simplemente desaparece sin dejar rastro que ese peso sencillamente se esfuma.

No.

Estas personas eran parte del entramado luminoso de nuestra alma y su bombilla se apago, no existen recambios ni sustituciones, tampoco puedes apartarlas sin convertirte en algo menos que un animal ¿como podrías dejar de querer a alguien que formó parte de tí mismo y murió?, esas partes apagadas, que nunca volverán a encenderse, es lo que entre otras cosas te lleva a darte cuenta de que mucho de lo que vivimos puede acabar en tan solo un segundo, que cualquier cosa que hagas sin sentirla sin desearla realmente, se vuelve tan efímera que resultará casi cómico cuando la gente te recuerde, haciendo cosas que no vivías intensamente, que no disfrutabas con pasión, es una prueba de madurez, la caza del lobo de un Espartano, la búsqueda Espiritual para muchos pueblos del otro hemisferio o simplemente el cumplir los 18 en este lado del mundo, es un paso que aunque puedas dar siendo apenas un niño (como en mi caso) te acerca algo mas a convertirte en el adulto que serás en el futuro, la primera herida de guerra directa al corazón.

Vuelvo a analizar y me efectuó una pregunta :
¿Y para alguien que no ha querido realmente nada ni a nadie? ¿Le está negada esa madurez, ese curtimiento?


Y seguí pensando en la respuesta.


Recuerdo una partida de rol en vivo (Hola mi nombre es Manu y soy rolero xD), recuerdo gente que fuerza a su propio organismo a elevar sus propias limitaciones físicas por mediación de la inducción química, moldeando su cuerpo para convertirlo en el cuerpo de un guerrero, para evolucionar físicamente para convertirse en una escultura andante, sin embargo carece de la valentía, el arrojo y esa leve carencia de aprecio por la integridad física personal, lo extrapolo a otras personas, otras situaciones...

Puedo sentirme dichoso, en la mayoría de los casos he estado rodeado de personas que a pesar de carecer del potencial físico de un guerrero han tenido el valor y el arrojo suficiente por dar la cara en situaciones de riesgo físico, moral y mental cuando se ha requerido, por eso me dan en cierta parte lastima aquell@s que son incapaces de agarrar el toro por los cuernos (incluso a sabiendas de que pueden perder) simplemente por el riesgo que ello conlleva, me gusta pelear por lo que pienso, por lo que creo, por lo que siento y me gusta tener gente cerca mía que haga lo mismo, me gusta tener camaradas, amigos, compañeros de aventura que se dejen animar y me animen cuando sea necesario, tener gente que a diferencia de los puntos de vista políticos, sociales, o filosóficos, tengan una corriente de pensamiento similar, gente con pelotas joder.


Esta vez sonriendo, seguí pensando.


Estoy bailando, la ubicación es un conocido lugar de baile de música electrónica anunciada constantemente en la emisora que patrocina este lugar y que las 24 horas del día no deja de mandarnos trallazos sonoros con la electrónica de los 80-90 y actual.

La pista está abarrotada, cierro los ojos, bailo, siento la música, sonrío mirando al cielo mientras bailo, escucho a mis dos compañeras de baile que me miran sonriendo a la par que miran a una chica que no deja de mirarme, me agacho sonriendo y les digo que no he venido a ligar, que solo he venido a bailar, esta escena se repite varias veces durante la noche, la cual pasó volando y si no hubiese sido un día mas de la semana habría llegado hasta el amanecer.

Sin embargo estos hechos, solo alimentan algo de lo que hasta hace poco no era totalmente consciente, me gusta saberlo, pero no jugar con ello, alguna que otra se chocó conmigo a posta para intercambiar unas palabras, aunque creo que ninguna de ellas consiguió su objetivo ya que las referencias a mi altura eran respondidas con una sonrisa y los "casuales" choques con una sincera disculpa por mi parte.

Me resulta agradable el saberlo, sin embargo, como he dicho antes, no me gusta jugar con la gente, dar indicios de que pretendes algo mas que lo que realmente pretendes esta MAL, no es Honorable, es algo que me parece un comportamiento excesivamente infantil y de personas que carecen de autoestima, el necesitar juguetear con alguien a quien sabes no le vas a dar los frutos de los indicios que le estas mandando, sigo sin entender lo que lleva al ser humano a comportarse así, ¿quizás la falta de seguridad en si mismo? ¿la carencia de pelotas?


Y melancólicamente Becqueriano sigo analizando.


Recuerdo imágenes proyectadas sobre una gigantesca pantalla, él le confiesa a ella que es un monstruo o que al menos así puede ser visto por el resto, y ella no le teme, el único miedo que tiene es el de perderlo.

Siento.

Pienso.

Analizo.

Quizás es algo que solo se pueda dar a una edad en la que la inocencia aun no ha sido destruida por infidelidades, por acciones de intereses manipuladores de terceras personas, por un incremento desmesurado de hormonas que provocan que el miedo sea efímero al lado del latir de un corazón compartido...

Quizás se ha pasado ese tiempo para mi y solo me quede ese "amor" que en tantas parejas he visto, algo "mediocre" algo hecho por costumbre, algo que a pesar de tener chispas de pasión y ternura, carece por completo de esa iluminación del alma y del corazón similar a Las Vegas en hora punta, podría tener eso, se que podría tenerlo, pero como diría Claudia en "Entrevista con el Vampiro" cuando se alimenta por primera vez de una humana "quiero mas", no puedo conformarme con algo que no me colme completamente, sin embargo encontrar esto es tan complicado como cabalgar un Unicornio, cuidar de una Rosa Negra, o pretender sacar de donde no hay...

Me observo a mi mismo, por dentro y por fuera, realmente la diferencia es que el es un personaje de un libro/pelicula y yo soy real, no poseo los ficticios dones del vampirismo ni soy inmortal, sin embargo mi arañado corazón es identico al suyo.

Y suspiro.

Sintiéndolo y analizando estos sentimientos críticamente, puedo observar no sin pena, que poco mas que mi propio reflejo de lo que sentía era lo que me devolvía, una imagen desfigurada de mi mismo, de lo que expresaba, de lo que daba, lo que valoraba...


Estúpido de mí.


Miro mi ultima carta una vez mas, quizás no tenga ningún significado para el resto, quizás solo sea un motivo mas de burla y de mofa, pero ya no me importa, he llegado a una conclusión que el silencio ha ayudado a macerar y lanzo mi ultima carta sobre la mesa.

Como diría alguien a un Rey Goblin :

"Porque mi voluntad es igual de fuerte que la tuya y mi reino igual de grande, no tienes poder sobre mi"

En otra situación, otro universo, alguien con un agónico grito y lagrimas en los ojos blandiría un arma de energía en un corte ascendente, partiendo y cauterizando el nexo entre dos almas, aunque después del corte, ve que en lugar de ser dos canales conductores, solo era un torrente de energía que salía de su mismo ser y cuyo destino era el vacio...

Y después de eso, en lugar de quedar una bombilla apagada, solo queda lo que había inicialmente.

Nada.