Cuando caen los heroes

Existen personas que por su forma de ser, por la trayectoria de su vida o simplemente por tener un magnetismo personal fuera de lo común, son vistas como ejemplos o iconos.

Estas personas son a veces idealizadas hasta los extremos.

Por golpes de suerte, o simplemente por ser "bastardos con suerte a las puertas del infierno" parafraseando la autodefinición de John Constantine estas personas han sobrevivido a numerosos reveses que les han dado sus vivencias personales, danzando inconscientemente (o no) en el filo de una cuchilla.

Hasta que se les acaba la suerte.

Una de estas personas fue la que me dio algo más de motivación para realizar algunos avances personales y profesionales.

Fotógrafo, arquitecto, bohemio, poeta, alcohólico depresivo y aficionado a las drogas blandas, con una personalidad controvertidamente magnética que hacia que nadie pudiese quedar indiferente ante su charla o puntos de vista, ante sus comentarios, haciéndose el tonto y riéndose de todo y de todos, pero con una inocencia (o inconsciencia) intrínseca, similar a la de un niño.

Hace algo más de un año en una de sus recaídas emocionales abuso más de la cuenta y se le acabo la suerte.

Algunas "personas" detractoras acudieron a los foros públicos donde era bien conocido en persona y a través de sus comentarios, anunciando su defunción, indicando de forma poéticamente oscura que sus andanzas y correrías nocturnas habían acabado en mitad de una de sus innumerables juergas etílicas.

La sensación que much@s sentimos fue de profundo dolor, pasando a rabia cuando nos enteramos que a pesar de que estaba gravemente afectado, seguía vivo.

Pero en coma tras un infarto cerebral.

Como dice el dicho mala hierba nunca muere, pero como todo, tiene su precio.

Hace poco quedé con el, en otro tiempo delgado y agudo como un látigo, había cogido peso y caminaba lentamente y con los brazos recogidos.

Sin embargo su agudeza mental no parecía haber sufrido merma alguna.

Me narro que el sacerdote le había dado la extrema unción, que hacia un par de meses no podía apenas moverse, estaba, según los médicos,condenado a mantenerse en posición semi-fetal para el resto de su vida, sin esperanzas a recuperar la movilidad ni a tener vida normal como antes.

A pesar de las aciagas esperanzas que los "entendidos" y "profesionales" le daban, el lucho, se negó a ello, combatió con su voluntad lo que su propia dejadez sobre su persona le había provocado, sobrepuso su voluntad a las negaciones que le daba su cuerpo impidiéndole moverse, con constancia, paciencia, coraje y dolor, mucho dolor.

Evidentemente no podrá volver a correr como antes, no podrá volver a hacer la "cabra montesa" para capturar una imagen desde un pico elevado, pero podrá volver a vivir.

Con esto solo puedo reafirmarme en mi forma de pensar/vivir, luchar por lo que uno desea, aunque duela, aunque moleste, aunque la mitad de los días uno desespere y desee tirar la toalla, no existen puertas imposibles de abrir sino llaves mal forjadas y no existe nada imposible de realizar sino una mente estrecha y una voluntad débil.

Siempre se puede hacer algo mas, solo tenemos que usar lo que nos diferencia de los animales, incluidos los borregos que caminan a dos patas y pensar, razonar, sentir y volver a hacerlo para encontrar la solución, el camino hacia nuestros objetivos.

El resto solo es cuestión de tiempo.